Los hombres en el despacho y las mujeres en la mesa del salón: cómo el teletrabajo ha evidenciado la desigualdad

Además de severas consecuencias sanitarias, la pandemia del coronavirus está agravando otros problemas sociales como la brecha de género. Y es que las circunstancias en las que hemos tenido que vivir a lo largo del último año han contribuido a que las mujeres asuman más carga de trabajo y cuidados. Algo que se traduce, irremediablemente, en renunciar o ver muy mermadas sus aspiraciones laborales.

Así se extrae de una investigación sobre género y desempleo en el Reino Unido que está llevando a cabo Aliya Hamid Rao, socióloga de la London School of Economics. En una conversación con la periodista Anne Helen Petersen para la newsletter Culture Study, Rao recuerda cómo durante la pandemia se ha puesto en evidencia que el trabajo del hombre sigue siendo al que se otorga mayor prioridad. Una realidad que puede explicar la tendencia a dividir los espacios de la casa, cuando los dos miembros de la pareja teletrabajan, del siguiente modo: los lugares silenciosos, como despachos o habitaciones independientes, se reservan para los hombres y las zonas comunes como la cocina, el comedor o el salón para las mujeres.

Cuando el trabajo del hombre se considera más importante

En parejas heterosexuales, cuando las mujeres se quedan sin trabajo encontrar otro rápido no es visto como una necesidad apremiante. Algo que sí ocurre en el caso de los hombres. De esta forma, explica Rao “el tiempo de los hombres se protege para que puedan dedicarlo a la búsqueda de empleo, quedando exentos, en concreto, de realizar las tareas domésticas y el cuidado de los niños. Tareas que, por lo general, siguen recayendo de manera desproporcionada sobre sus mujeres”. Rao observó, además, que esto es así “incluso cuando las mujeres aportan la mitad o incluso más de los ingresos familiares”.

En un contexto como el actual, en el que el hogar se convierte en el epicentro de la jornada laboral, ¿cómo afecta que se le otorgue más peso al puesto del hombre? Rao señala que «el hogar no es un espacio neutral: está empapado de expectativas de género y de las obligaciones que los miembros de la familia tienen entre sí«. Y en ese sentido se pregunta: “Si se priorizan los puestos de trabajo de los hombres, ¿significa esto que obtendrán espacios dedicados a centrarse en el trabajo remunerado, potencialmente alejados del ruido de los niños, y las mujeres no?”

Durante esta investigación, llevada a cabo entre los meses de abril y mayo de 2020, el equipo del IFS entrevistó a 3.500 familias. Entrevistas que pusieron también en evidencia la desigualdad a la hora de abordar las tareas domésticas y el cuidado de los menores en este contexto. Una situación que hace que, a largo plazo, “las mujeres corran el riesgo de ver su desarrollo profesional dañado”. Entre otras cosas, el informe recoge que las mujeres con hijos a su cargo trabajan solo un tercio de su horario laboral sin ser interrumpidas y que emplean 1,7 horas más que los padres en las tareas domésticas.

Las madres de menores que teletrabajan: las que más estrés sufren

Estas continuas interrupciones, la carga mental, la multitarea constante hacen que sean las madres las que hayan sufrido mayores niveles de estrés durante la pandemia.

“Algunas sienten que están todo el día trabajando”, explican los responsables del estudio. “A menudo, tener flexibilidad de horarios se convierte en una demostración continua y un ejercicio de responsabilidad para con sus superiores. Muchas de ellas están trabajando a la vez que están cuidando, y eso es durante todo el día”.

Además de sufrir mayores niveles de estrés, las mujeres con personas a su cargo o que realizan trabajos esenciales también han sido las más expuestas a la enfermedad durante los primeros meses de la pandemia.

FUENTE: SMODA.ELPAIS.COM

INDEPENDENCIA JUDICIAL: DE LAS PALABRAS A LOS HECHOS

Magister José Manuel Arroyo Gutiérrez
Ex magistrado y Profesor Catedrático UCR
Con frecuencia oímos discursos, reflexiones, conferencias; o bien se organizan debates, seminarios y congresos; o se escriben artículos, tratados, listas de mandamientos, tesis de graduación y un sinnúmero de manifestaciones académicas en torno al tema de la independencia judicial. Todas esas palabras están bien. Pero no son suficientes. Hacen falta las actuaciones y los hechos.
​Lo cierto, digo yo después de una vida profesional dedicada a la función pública y a la carrera judicial, es que el juez independiente es aquél que, por vocación, por valores y por integridad personal decide serlo. Hay muchas tentaciones y amenazas ahí afuera. No hay protecciones legales, constitucionales ni materiales que puedan detener la debilidad o el oportunismo de quien, desde la privilegiada posición de la judicatura, decide traicionar la misión esencial o el rol social decisivo que le corresponde jugar.
​Las principales amenazas a la independencia judicial vienen de los otros poderes, los formales y los de facto. El poder de los políticos, los personajes influyentes social, económica o religiosamente; el poder de los superiores dentro de la estructura misma del Poder Judicial; y ni qué decir la poderosa influencia de los medios de comunicación que presionan en uno u otro sentido. Y de otra parte, están también los poderes informales o de facto, el de los delincuentes comunes, y los peores, los de la delincuencia de cuello blanco o las mafias del crimen organizado. Venderse es la tentación más frecuente y fácil en la cual caer. Y no se trata sólo de la manera más pedestre o vulgar recibiendo dinero a cambio de favores. Están las formas sutiles como archivar una denuncia, dejar que prescriba la causa, absolver al culpable, condenar al inocente. Hay gente tan vendida que el agente poderoso no necesita ni siquiera llamarla, insinuarle o hacerle el depósito bancario. Su servilismo olfatea, adivina, intuye lo que se espera de él (o ella).
​Una tentación peligrosísima es trazarse una carrera judicial ascendente dispuesto a pagar cualquier precio; llegar a la cima con una encomienda que cambie la jurisprudencia para servir a los señores que prestaron ayuda; meterse en el mundillo de las cámaras y reflectores para ganar protagonismo público (pasando información a ciertos periodistas para contar con “buena imagen” y favores), o ser capaces de la infamia y la calumnia en los procesos de nombramientos (“si no soy lo suficientemente virtuoso inventaré vicios inconfesables en mis contendientes”; “si tengo que olvidarme de los amigos de ayer, pues cultivaré nuevas amistades”).
​Pero ante todo, esto de ser juez o jueza, tiene que ser una auténtica vocación. He visto jóvenes profesionales, competentes y valiosos, que tiran la toalla a medio camino. El trabajo judicial siempre es complejo y excesivo; exige muchas renuncias, sacrificios y ciertamente a veces es riesgoso, si es que se quiere hacer como es debido. La vocación auténtica, en el caso de los profesionales del derecho en general y particularmente respecto de los funcionarios judiciales, radica en el valor Justicia. Ese valor se refiere no sólo a la justicia del caso concreto, sino al valor de Justicia Social. No puede haber un buen juez que no recienta la desigualdad, la inequidad o la discriminación de seres humanos en su acceso a los derechos fundamentales. Serían como sacerdotes sin fe en Dios o como médicos a los que no les importe la salud de sus congéneres. Por cierto, que los hay, los hay.
​La última frontera de esa vocación auténtica está cuando el buen juez, llevado por sus principios y su integridad moral, enfrenta la amenaza, la descalificación, y hasta la agresión o violencia contra su vida, sin hacer concesiones, sin traicionarse a sí mismo ni traicionar el juramento de actuar conforme a la ley y sólo la ley. Es ahí cuando recuperamos la esperanza.
​La valentía no es un adorno más, prendido a la toga. Es un requisito sin el cual no hay justicia que valga.
Sabanilla, 17 de febrero de 2021.

SINO SE CONSIDERA IGNORANTE, MEJOR NO LO LEA:

“Tu nivel más alto de ignorancia es cuando rechazas algo de lo cual no sabes nada”
Parece que a muchas personas no les gusta que le digan IGNORANTES, cuando se les pide que se informen y llenen de conocimiento.
Se convierte la IGNORANCIA, en una grave ofensa y no se reconoce el desconocimiento como tal.
Yo me reconozco IGNORANTE, en muchos de los temas que me he dedicado a estudiar y mas aun en aquellos sobre los cuales tengo un desconocimiento total y no me sonroja decirlo ni aceptarlo.
Wayne Dyer, define en esta frase a la ignorancia voluntaria, a la que deja fuera de los espacios de aprendizaje, a aquella que aparece como rechazo a decir no sé.
Muchas veces se pierden las oportunidades de reconocer, descubrir, asombrarse y disfrutar de conocimientos, lugares, comidas, roles, y miles de otras posibilidades por no abrirse a aprender.
El conocimiento propio como defensa contra el mundo, la rigidez de pensamiento, el aferrarse a lo que siempre se hizo asi, son trampas que parecen cómodas y sin embargo son jaulas que separan de la libertad de pensamiento, a las elecciones libres, a lo novedoso.
Decir “no se” es reconocer la ignorancia desde el mejor lugar. No implica mostrarse vulnerable, incompleto o ineficiente. Los aprendizajes no tienen porqué terminar.
Y disfrutarlos desde el ser aprendiz eterno es hacer especial el universo como lugar para vivir. LO SIENTO, PERO SI USTED SE SIENTE OFENDIDO, PORQUE SE LE DIGA IGNORANTE, SIGA EN ELLO, A MI SI ME INTERESA APRENDER Y LLENARME DE CONOCIMIENTO.

¿Es la cárcel solo para los pobres en América Latina?

En distintos sectores de la población está extendida la idea de que los ricos rara vez son encarcelados. Casos de corrupción o desfalcos suelen ser saldados con multas.

“¡Cinco años de cárcel por robarse una gallina!”, dice un titular de la revista colombiana Semana de septiembre de 2014. “Caso Penta: paga multa y logra acuerdo”, dice el sitio web T13.cl de agosto de 2019. El primer relato se refiere a dos hermanos que comieron gallina y se fueron del restaurante sin pagar la cuenta. El segundo, a uno de los protagonistas de uno de los fraudes al fisco más sonados de los últimos años en Chile. Los dos primeros eran personas humildes. El otro, un empresario conocido, con influencias y contactos.

El desigual acceso a la justicia y la sensación de que hay sentencias suaves para los ricos y duras para los pobres, además de una aparente mano blanda contra funcionarios corruptos, fueron elementos que gravitaron en los recientes estallidos sociales latinoamericanos. Noticias similares a las que citamos al comienzo se encuentran por doquier, y no hay que hurgar mucho para encontrar casos emblemáticos, como el de Bastián Arriagada, joven de 22 años que estaba preso en Chile por vender discos pirateados cuando se produjo un incendio de la cárcel de San Miguel. Murió calcinado junto a otros 80 reos en 2010.

“Obviamente este fenómeno se repite muchísimo en la región, y si bien la idea de que los ricos pagan multas y los pobres van a la cárcel puede ser polémica, tiene razones y causas objetivas. Hay varios factores que lo explican”, dice a DW Marie-Christine Fuchs, jefa del Programa de Estado de Derecho para América Latina de la fundación alemana Konrad Adenauer (KAS). “Uno de esos factores son los estereotipos, es decir, pensar que un pobre migrante es automáticamente un delincuente, como ocurre en Chile con los mapuches. Ese tipo de prejuicios se percibe también en el trabajo de la Policía y la Fiscalía”, explica.

“Otro factor son las condiciones gravísimas de las cárceles. A ellas efectivamente llegan los más pobres, y hay muchos estudios sobre esto. Los delitos más catalogados son robos, hurtos u otros relacionados con drogas. Las personas salen de las cárceles en peores condiciones, porque faltan programas de reinserción. Y bueno, obviamente hay una amplia tasa de impunidad en todo lo que se llama delitos de cuello y corbata, como en Chile es el caso Penta”.

Hay avances, pero…

“Uno de ellos tiene que ver con una sensación de impotencia frente a la falta de igualdad ante la ley, especialmente con la aplicación de esta para los más pobres, mientras la élite se cree y se siente en un lugar de privilegio que le permite evadir la ley y protegerse”. Y agrega que “no es solo un problema sistémico de la justicia chilena, sino algo más profundo, es una sensación de una élite que se autoprotege en sus privilegios y riquezas”.

Pero hay otros condicionantes, pondera Fuchs. “Por ejemplo, políticos involucrados en actos de corrupción acceden a los mejores abogados, que siempre van a encontrar recursos legales para que el proceso nunca acabe”, explica. Si bien la experta alemana reconoce que ha habido avances, y que las defensorías públicas o del pueblo suelen contar con buenos especialistas, “se trata de instituciones que no siempre funcionan con muchos recursos y que obviamente no van a tener tiempo para defender todos los casos”.

Nuevas brechas en el horizonte

“El gran problema general de la ley en Latinoamérica es que hay una brecha gigante entre la norma y la realidad. Hay constituciones gigantes con derechos sociales y políticos, pero no siempre se cumplen”, dice Fuchs. También estima necesario que los pequeños delitos no se paguen con cárcel, sino con penas alternativas. Y pone sobre la mesa algo que ocurre en El Salvador que ella considera “terrible”: “Hay muchas mujeres en la cárcel porque se las acusa de haber intentado un aborto. Si una mujer pobre pierde a su hijo y no puede probar que no fue un aborto y no tiene dinero para un abogado que la defienda, puede ser que la metan en la cárcel. Es otro ejemplo gravísimo donde hay una política criminal ajena a la realidad de Latinoamérica, que debería cambiarse urgentemente”.

especialmente porque en muchos casos “la respuesta a los delitos sigue siendo muy antigua”

Pensemos en delitos como los informáticos, acceso a información privilegiada, colusiones, legislación antimonopolio o anticorrupción”, todos ellos elementos modernos que “no han sido fáciles de perseguir por su complejidad”.

Fuchs, en tanto, ve otra fuente de desigualdad en la pandemia del coronavirus. “Así como muchos de nosotros estamos trabajando desde casa, la Justicia también está operando a través de internet. Por eso, el acceso a ella dependerá cada vez más de tener un buen acceso a la red. Y si no ponemos atención a eso, teniendo en cuenta que hay 77 millones de personas en América Latina y el Caribe sin conexión a Internet, se gestará una nueva brecha y la desigualdad crecerá aún más”.

FUENTE: DW.com

Día de los enamorados. Feliz día de San Valentin a todos.

De mi parte yo vivo enamorado de mi vida, mis hijos, mis nietos, mi familia en general, mis amigos y mis enemigos, de mi trabajo y de todo lo que Dios a puesto a nuestro alrededor.
También estoy enamorado de mi esposa, con quien comparto lo bueno y lo malo. Alegrías y tristesas.
LOS AMO A TODOS.
Día de san Valentín
Valentín de Terni.Origen de la celebraciónReino Unido, alrededor del siglo XIV Día de celebración 14 de febrero Celebrado desde Siglo XIV
El día de san Valentín es una celebración tradicional de países anglosajones que se ha ido implantando en otros países a lo largo del siglo XX principalmente en la que las parejas de enamorados expresan su amor y cariño mutuamente. Se celebra el 14 de febrero,onomástico de san Valentín. En algunos países se conoce como día de los enamoradosy en otros como el día del amor y la amistad.
Historia
En Angloamérica hacia 1842, Esther A. Howland comenzó a vender las primeras tarjetas postales masivas de san Valentín, conocidas como «valentines», con símbolos como la forma del corazón o de Cupido. También en este día es común la tradición de regalar rosas a aquellas personas a las que se tiene un afecto especial .
Existen diversas teorías que otorgan a esta fecha el origen del Día de los Enamorados. En los países nórdicos es durante estas fechas cuando se emparejan y aparean los pájaros, de ahí que este periodo se vea como un símbolo de amor y de creación.
Leyenda
Muchos piensan que san Valentín se celebra desde hace poco y que surgió por el interés de los grandes centros comerciales, pero su origen se remonta a la época del Imperio Romano.
San Valentín era un sacerdote que, hacia el siglo III, ejercía en Roma. Gobernaba el emperador Claudio II, quien decidió prohibir la celebración de matrimonios para los jóvenes, porque en su opinión los solteros sin familia eran mejores soldados, ya que tenían menos ataduras.
El sacerdote consideró que el decreto era injusto y desafió al emperador. Celebraba en secreto matrimonios para jóvenes enamorados (de ahí se ha popularizado que San Valentín sea el patrón de los enamorados). El emperador Claudio II se enteró y como san Valentín gozaba de un gran prestigio en Roma, el emperador lo llamó al palacio. San Valentín aprovechó aquella ocasión para hacer proselitismo del cristianismo. Aunque en un principio Claudio II mostró interés, el ejército y el gobernador de Roma, llamado Calpurnio, lo persuadieron para quitárselo de la cabeza.
El emperador Claudio dio entonces orden de que encarcelasen a Valentín. Entonces, el oficial Asterius, encargado de encarcelarlo, quiso ridiculizar y poner a prueba a Valentín. Lo retó a que devolviese la vista a una hija suya, llamada Julia, que nació ciega. Valentín aceptó y, en nombre del Señor, le devolvió la vista.
Este hecho convulsionó a Asterius y su familia, quienes se convirtieron al cristianismo. De todas formas, Valentín siguió preso y el débil emperador Claudio finalmente ordenó que lo martirizaran y ejecutaran el 14 de febrero del año 270. La joven Julia, agradecida al santo, plantó un almendro de flores rosadas junto a su tumba. De ahí que el almendro sea símbolo de amor y amistad duraderos.

SEMINARIO ASPECTOS PRÁCTICOS DE LA PRUEBA

Una charla sobre aspectos prácticos de la prueba con extraordinarios charlistas, son herramientas que servirán para el día a día en el desarrollo de la profesión sea que esté en el sector privado o publico.
Días de evento
Lunes 15 de Febrero 2021
Martes 16 de Febrero 2021
Miércoles 17 de Febrero 2021
HORA: 5:30 p.m. a 8:00 PM
Costo:
C 5,000.00 PARA ASOCIADOS
C20,000.00 NO ASOCIADOS
CUPOS LIMITADOS
Incluye certificado de participación
Inscríbase en el siguiente link:
Luego de la inscripción, recibirá un correo electrónico de confirmación con información para unirse al seminario web.
Realice su depósito en las siguientes cuentas.
BAC CREDOMATIC:
940402555
IBAN: CR72010200009404025551
BANCO NACIONAL:
100-01-203-000083-3
IBAN: CR12015120310010000837
SINPE MÓVIL: 8881-4921
Asociación Internacional de Profesionales de Derecho C.R.
Cédula Jurídica: 3-002-779448
Si gusta asociarse o referir a alguien para asociarse puede hacerlo mediante el link:
Recuerde nuestro número de servicio al cliente y asociados es 8881-4921, cualquier duda con todo gusto.
CHARLISTAS:
Jorge Olaso Álvarez
David Lara Torres
Paola Gutiérrez Mora
Mario Naranjo Luna
María Celeste Jiménez Riveros
Alberto García Cháves
Carlos Picado Vargas
Shirley Víquez Vargas
DISCLAIMER: Las opiniones y criterios vertidos en esta charla, taller, seminario o congreso son de exclusiva responsabilidad de quienes las emiten y no representan necesariamente el pensamiento o posición de nuestra organización.
FUENTE: AIPDCR

¡Feliz Día Internacional del Abogado!

Hoy en el día internacional de los abogados y Abogadas, recuerdo este hermoso texto, autoria de nuestra colega y amiga Male Capetillo Cabrera.
Ser abogad@ Estudiar derecho es fácil. Lo difícil es…
Lo difícil es ejercerlo. No hay rama que no te sacuda un día, y viene a ser el día que menos lo esperabas. Nunca vas a estar preparada para ver cómo el dragón de la legalidad despedaza la justicia con sus dientes afilados.
Nadie me dijo nunca que una niña de 6 años me iba a tomar la mano mientras identificaba a su violador, e iba a pedirme que la acompañara a todas sus diligencias, desde su declaración hasta su prueba en ginecología… Ni nada me prepararía para cuando me dijo que su tía le decía que estaba destruyendo a su familia al señalar a su esposo como su agresor.
Nada me preparó para que una vez al firmar un testamento, el testador me dijera: “No lo firmo. Cámbieme todo lo que dice. Mi hijo lo redactó. Me amenaza que si no firmo me deja sin comer”. Su rostro desde la silla de ruedas me desgarró el alma, ahí entendí por qué mi exjefa siempre pedía que los testamentos se firmen A SOLAS sin ningún familiar disfrazando alas de buitre con sonrisa de buen samaritano.
Mucho menos te prepara la vida para decirle a una mujer que su marido murió , ni sabes si debes abrazar a una mujer recién golpeada que tiembla como una hoja en un Ministerio Público lleno de gente que observa su rostro destrozado a la luz de los flashes.
Nada te prepara para el derecho, para decirle a tu cliente que sus escrituras son falsas y que le han timado su dinero.
Nada te prepara para decirle a una madre que su hijo murió a manos de un amigo, y ver comadres de toda la vida ser separadas por un rayo.
Nada te prepara para llegar con tus camiones a un desalojo y ver niños que te miran cargando sus juguetes con un rostro de reproche.
Nada te prepara para que alguien se derrumbe en tus brazos de dolor.
Para contener al padre de un menor violado de volverse un asesino.
Para contener al padre de un menor violado de volverse un asesino.
Para separar a una familia.
Nada te prepara para mirarte a los ojos con la muerte.
Nada te prepara en la universidad para contar las puñaladas a un cadáver pequeño.
Para responder preguntas como ¿por qué a mí?… Para lidiar con el dolor, con la impunidad.
Nada te prepara para ser el blanco de reproches infundados.
Para los golpes, los gargajos.
Para las mentadas de madre en plena audiencia y los madrazos ejidales.
Nada te prepara para que una mujer con el brazo roto y la quijada descuadrada firme el perdón a tu contrario.
Para la gente que no quiere saber nada más de un homicidio.
Nada te prepara para entrar al foso de demonios que rodean el mundo del derecho.
Es bajar a los círculos del infierno sujetándose el propio corazón para no perderse y salirse del camino.
Es avanzar a paso lento conservando el miedo porque ello te recuerda quien eres.
Porque nada te prepara para ver familias disputándose herencias cuando el padre aun agoniza lleno de tubos y nadie quiere vender nada para pagar el hospital porque “es su herencia”.
Hay momentos muy contados dónde tú eres quien arroja estrellas al cielo, esos momentos por ejemplo cuando un menor corre a los brazos de su madre que no lo ha visto en tanto tiempo y sabes que, ahí, ahí es donde le corresponde estar.
Momentos cuando un padre tiene en las manos sus derechos de visita a sus hijos a pesar de no quererlo su ex mujer, y ves en los niños la felicidad de estar con su papá… Sabiendo que tú lo hiciste posible.
Cuando alguien cobra su pensión.
Cuando alguien recupera su casa.
Cuando las puertas del penal se abren y la familia vuelve a estar completa.
Cuando la reja de una celda se cierra y una mujer respira porque podrá dormir en paz.
Cuando un padre firma el testamento dividiendo entre sus hijos lo poco o mucho que le dio la vida.
Cuando un matrimonio deja de existir.
Cuando un matrimonio va a empezar.
Cuando un trabajador se aprovecha de tu confianza.
Cuando un patrón explota su posición.
Cuando todo se viene encima… Ahí estás.
Nada podría haberme preparado para “no tengo como pagarle licenciado pero mi hijo esta detenido”. Para el “quiero consignar 200 pesos de pensión por mis 4 hijos”… Para “¿Cuánto quiere por dejar el caso le doy el doble que mi contraparte?”
Nadie te prepara para cuando se te pasa un término que trasciende en lesionar a un representado, ni para que te acusen injustamente de vender información o de venderte al otro lado.
“Nadie sabe lo que cuesta hacer 3 hojitas” por las que estás cobrando. Ni para la traición, ni la corrupción, ni la difamación.
Nada te preparara para que en cada fiesta te digan que todos saben de leyes, que no eres médico para cobrar consultas. Que eres una lacra social y te confundan con los políticos.
Nadie te dará las gracias, nadie te pagará por gusto.
Nadie te va querer y tendrás que aprender a comprenderlo, pues nosotros como la muerte, anunciamos la presencia de la realidad en esta vida. Nuestra presencia le revela al hombre que no puede vivir sin reglas, que no sabe respetar personas distintas, que no ha aprendido a tolerar, a amar, a dar.
Somos los custodios de la armonía social.
Somos los responsables del orden, de defender al hombre de si mismo y a pesar de sí.
Somos las voces de las víctimas… El dedo acusador, la barrera del respeto, el límite del poder.
Somos los que giran las ruedas del destino y aun así nos mienten. Con las manos goteando sangre y aferradas al cuello de la víctima escuchamos un “yo no la maté” y se nos juzga. Porque le otorgamos defensa a un acusado, sin entender la sociedad que no es defender al culpable o proteger al inocente. Es evitar que cada uno de los ciudadanos se corrompa creyendo que al tomar la justicia en sus manos, matar a otro no lo hace asesino.
Es la función del abogado ponerse entre el ser humano y su lado más barbárico. Es protegerles de que la manzana podrida les pudra también.
Ser abogad@ es mirar el fondo del abismo y desde ahí… Meter sin miedo la mano para rescatar la luz de la oscuridad.
Y aun con eso… Elegiría mi carrera mil veces más.
Amo ser Abogado
Bello texto compartido por el jurista Adolfo Alvarado Belloso.
Me indican en un pots esto:
Hermoso texto de la jurista mexicana, escritora y amiga Male Capetillo Cabrera.

Día Internacional del Abogado 2021

El 3 de febrero es la fecha elegida para celebrar en todo el mundo el Día Internacional del abogado. Un día para reconocer el trabajo de los y las abogados y abogadas; una profesión vocacional e imprescindible.

Todos nuestros derechos, libertades y obligaciones — así como sus respectivos límites — están recogidos en diferentes reglamentos, leyes, códigos y normas. Como sociedad, vivimos rodeados de todos estos instrumentos. Y el Derecho, como disciplina encargada de construirlos, interpretarlos y aplicarlos, crece y evoluciona conjuntamente con la sociedad a la que pertenece. Sus objetivos últimos son la igualdad, la justicia, la seguridad y la protección de todos sus integrantes, sin distinción y en todos los órdenes de la vida.

Pero no todos podemos dominar el lenguaje, los mecanismos y las herramientas necesarias para que esa «maquinaria», la del Derecho, funcione de manera eficiente. También como sociedad necesitamos profesionales jurídicos especializados que nos ayuden en nuestra convivencia e interacción con la Ley.

Estamos hablando de los abogados, una profesión vocacional, pero imprescindible, sin la que sería imposible la cohesión social y el ejercicio de nuestros derechos fundamentales. Los abogados conforman un colectivo profesional incombustible y dinámico, con incontables campos de actuación, y son una de las garantías del Estado de Derecho.

¡Feliz Día Internacional del Abogado!

FUENTE: DIARIOJURÍDICO.com

Irrespeto y discriminación son motivos del despido sin responsabilidad patronal

Definitivamente el derecho laboral es un mundo muy particular dentro de la doctrina, jurisprudencia y legislación, por cuanto, al ser de aplicación a una realidad social que nos interesa a todos como seres humanos -ya que todos nos debemos ganar el sustento trabajando, produciendo, haciendo, sirviendo, es decir, ayudándonos entre todos para mantenernos como civilización suprema por sobre el resto de los habitantes del globo terráqueo-, es que precisamente y con base en ello nos hemos ideado principios distintos al resto de las otras disciplinas del derecho (sea civil, penal, comercial, etc.).

Ahora bien, refiere el profesor italiano Gustavo Zagrebelsky que en estos tiempos no hay nada estable y todo está sujeto a revisiones intelectuales; es más bien reconfortante saber que el derecho es objeto de reflexiones y desvelos, conducentes a su función precisa dentro de nuestra sociedad dinámica, que es satisfacer los intereses sociales en pro de una convivencia pacífica y ordenada; es por lo que dentro de este pensamiento podemos visualizar, dentro del campo laboral, estos desvelos de nuestros legisladores por adaptar a la realidad del presente siglo el derecho social, que hoy nos toca vivir y hacer dable.

Así y ya dentro de la temática, en estos últimos tres años se han creado nuevas causales a favor de la parte patronal para poder despedir a una persona trabajadora sin su responsabilidad; es decir, sin pagarle preaviso y auxilio de cesantía al estar transgrediendo precisamente principios elementales que deben regir en toda relación de empleo, tales como la buena fe, lealtad, comunicación, respeto, legalidad, buen trato, proactividad, empatía y otros que durante el desempeño laboral son imprescindibles para hacer posible una convivencia.

Es por ello que en caso de irrespetarse o transgredirse los mismos, el legislador permite que cese la misma, sin ninguna responsabilidad patronal, como una especie de castigo social.

Dentro de las nuevas causas (aparte de las previstas en los artículos 81 y 369 del Código de Trabajo) es oportuno mencionar tres específicas.

A partir de la reforma laboral y con el fin de mantener libre de discriminación el inicio mismo de una relación laboral, como su desarrollo, se promulgó que una persona trabajadora (sea del sector público o privado) que en el ejercicio de sus funciones relativas a reclutamiento, selección, nombramiento, movimientos de personal o de cualquier otra forma que provoque alguna discriminación (sea por motivo de edad, etnia, sexo, religión, raza, orientación sexual, estado civil, opinión política, ascendencia nacional, origen social, filiación, discapacidad, afiliación sindical, situación económica o cualquier otra forma análoga) va a incurrir en falta grave para los efectos del artículo 81.

Además, mediante cambios a la Ley VIH, como presupuesto esencial del derecho a una vida humana en libertad e igualdad dentro de un entorno libre de actitudes y prácticas “estigmatizantes y discriminatorias” se incluyó un inciso m, dentro del artículo 81 mencionado, cuando una persona trabajadora incurra en actos discriminatorios contra otra por su condición de ser portadora de VIH, que da lugar a un despido sin el pago de las prestaciones legales como sanción máxima dentro del ámbito de la relación laboral sin perjuicio de cualquier otra responsabilidad en que se incurra. Sin obviar el inciso n) de derecho colectivo, cuando la persona trabajadora incumpla con el plan de servicios mínimos, durante una huelga.

Dentro de esa revisión intelectual a la que hace alusión Zagrebelsky pareciera que, como sociedad, estamos tratando de conjurar cualquier acción u omisión que huela a exclusión, aislamiento, segregación, sin que medie una explicación objetiva, racional y proporcional todo en pro del respeto a la dignidad humana.

*Doctor en Derecho Laboral

FUENTE: ¡QUE TORTA!